• A través del programa “Contigo en la UVM”
  • El objetivo, que los estudiantes con discapacidad intelectual se integren a la experiencia universitaria

 

México, D.F., a 24 de marzo de 2014.- La Universidad del Valle de México Campus Querétaro apoya  a seis jóvenes con discapacidad intelectual, de entre 18 y 22 años de edad, a desarrollar competencias académicas-funcionales, sociales y laborales que les permitan integrarse a la vida comunitaria y productiva, a través del programa “Contigo en la UVM”.

El programa tiene dos objetivos: por una parte, integrar a los jóvenes con discapacidad intelectual a la vida universitaria sin necesidad de que cursen una licenciatura y por otro, implementar en la comunidad universitaria el tema de la inclusión,  comenta el Profesor Francisco Teutli Guillén, Coordinador del Programa “Contigo en la UVM”.

“Los seis chicos tienen la oportunidad de relacionarse con jóvenes de su misma edad, socializar con ellos, ampliar su círculo de amistades y copiar algunos patrones sociales que les permiten desenvolverse mejor. Participan en actividades académicas, deportivas, recreativas e incluso se inician en el desarrollo de prácticas laborales”,  señaló Francisco Teutli.

En cuanto  a los beneficios para la población universitaria, “nosotros  vemos como una realidad que los estudiantes que conviven con personas con discapacidad se forjan con otros valores como el respeto a la diversidad, el aprecio al individuo sin importar sus condiciones, etc. Estos jóvenes universitarios son los futuros empleadores, empresarios, gerentes, directores de diferentes instituciones que hoy por hoy estoy seguro podrán dar empleo a la población con discapacidad, estos estudiantes de la UVM son los futuros empleadores incluyentes”, manifestó el coordinador del programa.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en Querétaro hay 94 mil personas con discapacidad y solamente dos de cada 10 tienen empleo digno, y el 5.7 por ciento de la población económicamente activa tiene algún tipo de discapacidad.

Toño

Antonio Correa tiene 20 años de edad, actualmente toma algunas clases de fisioterapia en las que le están enseñando a dar masajes, colocar diferentes tipos de compresas y aprende también a cómo debe apoyar a gente que se encuentra en silla de ruedas. “Toño”, como le llaman sus compañeros de clase, tiene una discapacidad intelectual que requiere de apoyos mínimos: si bien tiene algunas dificultades en su dicción, es capaz de valerse por sí mismo al punto de ser capaz de tomar el transporte público y llegar solo a la universidad.

El proceso de formación de Toño es diferente al resto de los jóvenes universitarios, “él toma materias de acuerdo a su propio ritmo de aprendizaje y al grado de avance que observan sus maestros. Tomando en cuenta que Antonio cursa materias prácticas, quizá más adelante le interese trabajar como asistente de un fisioterapeuta”, señala el también Coordinador Académico del Centro de Apoyo y Calidad de Vida CALI A.C., Francisco Teutli.

De los seis jóvenes con discapacidad intelectual integrados a la UVM Campus Querétaro, tres son mujeres y tres son hombres.

Alejandro García es un joven con síndrome de Down, cursa materias del área de gastronomía. “Estoy seguro que podrá trabajar como asistente en un restaurante, preparando algunos alimentos, quizá sea el encargado de las ensaladas, o de preparar algunos postres; Alex le gusta mucho el ambiente de restaurantes,  sueña con poner su cocina económica, para ello cuenta con el apoyo de su familia y de CALI A.C.”, manifestó Francisco Teutli.

El objetivo final del programa “Contigo en la UVM”, es que estos jóvenes con discapacidad intelectual sean parte del ambiente estudiantil y en el futuro tengan habilidades para ingresar a un trabajo formal y que sean contratados como a cualquier a otro empleado ya que contarán con las competencias para ello.

AZC/SMH 

AlexGarcía

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