• Los factores genéticos, emocionales, sociales y ambientales contribuyen a comer de más o no comer; este desequilibrio puede detonar enfermedades crónicas.

Uno de los principales propósitos para arrancar un nuevo año es bajar de peso o comer saludable, sin embargo, diversos estudios han revelado que solo nueve de cada diez personas cumplen con este objetivo.  De acuerdo con la nutrióloga, Ana Laura González de la Universidad del Valle de México Campus Querétaro, para lograr con éxito una alimentación y cuerpo saludable durante todo el año, es necesario entender que la nutrición considera un proceso biopsicosocial, en donde situaciones biológicas, las emociones y el contexto social,  condicionan la conducta alimentaria.

La Mtra. Ana Laura González, explicó que durante el periodo llamado “Guadalupe-Reyes”,  las personas comen de más, disminuyen la actividad física, beben menos agua, duermen menos, tienen inestabilidad emocional -ya que en esta fecha existen emociones positivas o negativas de acuerdo a las experiencia de vida de cada individuo. Todos los anteriores son factores que contribuyen al desequilibrio en la alimentación.

Reiteró que la alimentación saludable es clave, no solo para lograr un cuerpo esbelto, lo más importante es para mantenerse sanos, vivir más tiempo y vivir bien. La especialista recordó que la mala nutrición está relacionada con la aparición de enfermedades crónicas, tales como obesidad, hipertensión, colesterol, diabetes, incluso cáncer y problemas cardiovasuclares, por mencionar algunos.

Ante este contexto, la Mtra. Ana González, indicó que tomar la decisión genuina de apostar por la salud es lo más importante para lograr este propósito, “desde ahí empieza todo, a partir de nutrir nuestras decisiones de salud”. 

A decir de la especialista, adherirse a un plan saludable está al alcance de todos y es muy sencillo.

  1. Tomar agua simple.
  2. Comer más frutas y verdudas (todas las verduras que quieras).
  3. Moverse más.
  4. Disminuir carbohidratos.
  5. Incrementar consumo de proteínas.
  6. Eliminar la opción de cualquier producto milagro o dieta de fantasía. Una mala alimentación de años no se equilibrará en una semana.

Agregó que siempre hay opciones para incluir todos los alimentos. Por ejemplo, el huevo es referencia en contenido de aminoácidos, mientras que, los frijoles, habas, lentejas, garbanzos y combinaciones de cereales son un excelente aporte de proteína.

En tanto, para fortalecer el sistema inmunológico, la Mtra. Ana González, recomendó consumir Vitamina A (huevo, leche, carne roja) y C (que se  encuentra en los cítricos, fruta de color naranja y amarillo), dormir por lo menos ocho horas -tener una rutina ayuda a dormir mejor-. “Dormir poco da más hambre y ocasiona que el sistema inmunológico se deprima”, advirtió. 

¿En donde está el secreto? En trazar un plan realista, objetivo, alcanzable, medible y considerar un plan de nutrición biopsicosocial. 

Respecto a la nutrición biopsicosocial, en primer lugar, está la parte biológica y bioquímica; cada persona debe generar conciencia de que tiene un perfil genético individual, ritmos y hábitos distintos, además debe considerar si tiene alguna condición de salud. “Para establecer hábitos: si no caminas, camina 15 minutos al día, dado que la referencia es cero, entonces todo lo que se hace en adelante es bueno y se va aumentando poco a poco. Un paso a la vez, si no tomas agua, toma un vaso, eso ayudará a que te adhieras a un plan, y empieces a generar una conducta diferente”, detalló. 

Con relación al aspecto psicológico, se debe tener en cuenta que las emociones son determinantes para tomar decisiones, por lo tanto, todo lo que pensamos genera un impacto en lo que comemos. Por ejemplo, comer pensando en cuántas calorías se están consumiendo y cuántas horas necesitarás para bajarlo, provoca un desequilibrio.

Para atender el contexto socioambiental, sugiere establecer horario para cada alimento. No comer mientras se trabaja. Dedicarle tiempo y justo valor a la alimentación puede hacer la diferencia en cómo el cuerpo está recibiendo esos alimentos.

La nutrióloga de UVM Campus Querétaro, Ana Laura González, reiteró que antes de adherirse a cualquier plan nutricional es muy importante consultar a un profesional en Nutrición, quien considerará todos aspectos mencionados y podrá brindar las indicaciones adecuadas para cada caso. 

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