Ciudad de México 7 de febrero 2018. La escasez de agua es un riesgo inminente a corto plazo, no sólo por cuestiones de sobrepoblación, también por la falta de tratamiento, saneamiento, por la deficiente infraestructura hidráulica y el desperdicio del recurso pluvial advierte el especialista en Ciencias y Medio Ambiente, Víctor Amaury Simental Franco de la Universidad del Valle México Campus Toluca.
El Dr. Simental explicó que en su investigación La Ciudad de México un espacio socio-urbano no sustentable. Una propuesta de sustentabilidad hídrica, plantea un problema de carácter urbano y ambiental, que requiere involucrar aspectos económicos, sociales, culturales, fiscales e institucionales, para el correcto desarrollo sustentable.
Simental propone en su investigación acciones legislativas y reglamentarias para el aprovechamiento de agua de lluvia. La principal es establecer que las nuevas edificaciones deben considerar un mecanismo de captación y aprovechamiento de agua pluvial e incentivar a través de disminución de pago de impuesto predial y pago de suministro de agua de estos inmuebles.
De acuerdo con la Comisión Nacional del Agua, en la Ciudad de México, llueve alrededor de 35 mil litros por segundo al año, mientras que los habitantes de la capital consumen 30 mil litros por segundo.
Por otro lado, expuso que para resolver el problema hídrico en la Ciudad de México, es imprescindible que el gobierno de la ciudad invierta en dos aspectos, en primer lugar en la rehabilitación de su infraestructura hidráulica, ya que estimaciones oficinales muestran que 40% del agua de la Ciudad se pierde por fracturas en su propia infraestructura, se trata de la misma cantidad de agua que se trae de fuentes externas.
“Si no existiera esa cantidad de fugas de agua no tendrían que llevarse el agua de Lerma y del sistema Cutzamala” dijo el especialista.
De acuerdo a la investigación de Simental otro de los temas indispensables es el tratamiento completo de aguas residuales, considera necesarias acciones inmediatas; el tratamiento y reutilización de las aguas negras para uso de riego de jardines públicos, la implementación de tecnologías innovadoras, tendientes al aprovechamiento y ahorro del agua, tanto en industrias como en hogares, estableciendo su obligatoriedad.
Aunado a estas acciones es fundamental que se fomente una nueva cultura del agua ya que resulta necesaria la corresponsabilidad individual y colectiva en el manejo del recurso entre ciudadanía y gobierno.
Promover la optimización en el consumo del agua, orientar la administración del vital recurso, así como reforzar campañas de educación y concientización para el correcto uso del agua en la población, todo ello redundaría en conseguir un sistema hídrico sustentable en la Ciudad de México.
En su obra el Dr. Simental pone en manifiesto la privatización del recurso hídrico en definitiva no es una opción ya que esto tiende a la conformación de monopolios, que en lugar de contribuir efectivamente a resolver los problemas relacionados con el agua, los acentúan, máxime que el interés del inversionista es obtener la mayor ganancia en el menor tiempo posible, siendo lógico que le interese continuar con los patrones de consumo actuales (despilfarro) y de ser posible incentivar esa demanda.
“Al privatizar un recurso solo se llama a la competencia durante la primera licitación, después se convierte en un monopolio”, dijo.
Por otra parte, Simental abundó en que de los problemas actuales que implica la sobre explotación del acuífero de la Ciudad de México, como son: el hundimiento del terreno, que afecta a la infraestructura tanto pública como privada y la extracción de agua cada vez a mayor costo y con una menor calidad, tenemos que se corre el riesgo inminente de agotar definitivamente las reservas de agua existentes en el subsuelo de la metrópoli.
Como consecuencia de lo expuesto, es evidente que se requiere la intervención gubernamental, a fin de regular el uso racional del agua, lejos de los intereses económicos de los grupos empresariales, a través de medidas que involucren a la sociedad de una manera más participativa, tomando en cuenta factores sociales, económicos y físicos, manifestó Víctor Amaury Simental Franco.
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